Los fallos en el suministro eléctrico son muy comunes y pueden darse en cualquier época del año, aunque la preocupación aumenta con las lluvias y las tormentas eléctricas. Más allá de estar sin electricidad durante un tiempo, los fallos en la red eléctrica puede dañar los dispositivos electrónicos y ocasionar la pérdida de datos.
Frente a esta problemática, hay varios aparatos que sirven para proteger el ordenador, el rúter y cualquier otro dispositivo. Estos aparatos son el protector de tensión, el regulador de tensión y el Sistema de Alimentación Ininterrumpida (SAI). Por ello, es recomendable tener uno, sobre todo, en aquellos lugares con un suministro eléctrico irregular, como es el caso de las zonas rurales. Sin embargo, antes es importante conocer qué fallo eléctrico ha habido para elegir un aparato que proteja del fallo.
Fallos frecuentes del suministro eléctrico
- Subtensión: también llamado caída de tensión, se produce cuando la amplitud de la tensión es inferior a la normal. En concreto, cuando la tensión baja en un 10 ó 15 % del valor nominal, alcanzando menos de 200V.
- Sobretensión: cuando la amplitud de la tensión está superior a la normal, es decir, al superar más del 10 % del valor nominal, en el caso de la mayoría de los países de la Unión Europea. Más o menos cuando la tensión supera los 253V.
- Picos de tensión: son subidas o bajadas repentinas de la tensión. Su duración es corta, pero de mayor amplitud por irregularidades en el voltaje. Este tipo de fallo eléctrico puede quemar los equipos.
- Ruido eléctrico: también conocido como electromagnético, es la interferencia que surge de las cargas externas y contaminan la red eléctrica. En otras palabras, es la variación en el voltaje de poca amplitud y puede afectar al hardware del ordenador.
- Corte de energía: es la ausencia del abastecimiento energético. La empresa de electricidad suele comunicar este fallo si el corte es intencionado, por ejemplo, por obras. No obstante, si el corte de energía es por un fallo eléctrico de forma repentina, puede ocasionar la pérdida de datos e información relevante de los dispositivos.
Para que estos fallos no afecten a su equipo, es aconsejable disponer de un Sistema de Alimentación Ininterrumpida (SAI), cuya función es corregir los fallos del suministro eléctrico o suministrar de potencia eléctrica en un intervalo de tiempo limitado. Es una de las formas de solucionar los fallos en el suministro eléctrico.